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CUIDADOS BÁSICOS PARA TU MASCOTA EN INVIERNO21/06/2021




El invierno puede resultar muy perjudicial para la salud de nuestro perro. Al igual que cuenta con la protección de su pelaje, es posible que nuestro amigo peludo sufra las consecuencias negativas de las bajas temperaturas del invierno.
 
Vea algunas sugerencias para cuidar mejor y mantener protegido tu perro durante el invierno:
 

Higiene

Debes procurar evitar el exceso de humedad o altas temperaturas producidas por la calefacción que puedan provocar dermatitis o mudas de pelo inesperadas al perro. Es importante peinarlo regularmente para evitar que se formen nudos en su pelo ya que estos pueden impedir la correcta transpiración de su piel.
 

Hidratación

Es importante que revise que siempre disponga de agua limpia y fresca y que esta no se haya congelado en caso de que viva en zonas en las que se alcanzan temperaturas muy bajas.
 

Alimentación

Es esencial que tu perro lleve una adecuada alimentación. Debes procurar que tu mascota reciba una dieta que le aporte los nutrientes necesarios para reforzar sus defensas y que le proporcione la energía que necesita. También hay que tener en cuenta que el perro tiende a reducir su nivel de actividad en invierno, por lo que debes vigilar que no esté sobrealimentándolo. Acudir al veterinario es la mejor alternativa para asegurar de que tu mascota recibe la alimentación que más se adecua a sus necesidades.
 

Ropa para perros

No siempre es necesario que tu perro lleve un abrigo u otro tipo de ropa para perros, aunque sí puede ser beneficioso en caso de perros ancianos y con artrosis. Pero puedes ser una buena idea ponerle un chubasquero cuando lo vayamos a sacar a pasear en días lluviosos.
 

Lugar para descansar

La cama del perro debe ser calentita y cómoda y estar resguardada de posibles corrientes de aire. También puedes proporcionarle una manta para ayudarle a conservar mejor el calor.
 

Salidas al exterior

Es recomendable intentar sacar al perro en las horas de más calor siempre que sea posible, evitando así exponerlo a las inclemencias del tiempo durante las horas más frías del día.
 
Si el perro vuelve mojado de su paseo es muy importante que lo seques completamente, prestando especial atención a las patas, pecho, abdomen y axilas, con esto evitaras que contraiga distintas enfermedades derivadas del enfriamiento.
 

Cambios bruscos de temperatura

Intente evitar que tu perro experimente cambios bruscos de temperatura ya que estos son muy perjudiciales para su salud, pudiendo ser causantes de distintas patologías propias del invierno. Si contas con calefacción en casa es recomendable apagarla 10 minutos antes de sacar a pasear al perro para evitar que sufra el cambio drástico de temperatura al salir al exterior.
 

Enfermedades comunes que puede sufrir tu perro en invierno

Ahora que sabes como proteger a tu perro en invierno, sepa un poco más sobre las enfermedades comunes en esa época del año.
 
Bronquitis: es consecuencia de una infección, pero en este caso se localiza en los bronquios. Entre los síntomas destacan la tos persistente, dificultades para respirar, sonidos pulmonares y fiebre.
 
Traqueobronquitis infecciosa o tos de las perreras: es una de las patologías más comunes en esta época del año. Se caracteriza por la inflamación de la cavidad nasal, tráquea y bronquios (vías respiratorias altas). Los síntomas comunes asociados a esta patología son: secreciones y congestión nasal, tos, ojos llorosos, falta de apetito, somnolencia, estornudos, fiebre y vómitos.
 
Pulmonía: está provocada por la exposición a bajas temperaturas y sus efectos pueden verse agravados si el perro está expuesto a agentes contaminantes nocivos para su sistema respiratorio. Los perros que padecen patologías pulmonares son más proclives a padecer este tipo de dolencias. Sus síntomas son tos persistente, mucosidad, fiebre, estornudos, pérdida de apetito, malestar y apatía.
 
Faringitis y laringitis: están provocadas por una infección habitualmente por culpa de cambios bruscos de temperatura que provoca dolor, inflamación e irritación en la garganta del perro. Entre los síntomas comunes destacan: tos y afonía, fiebre, dolor al tragar, lo que puede derivar en falta de apetito aparente y náuseas.
 
Ante la presencia de cualquiera de estas enfermedades es importante que acudas al veterinario. Nunca medique el perro sin la prescripción previa de un veterinario, pues solo él es capaz de indicar cuál es el tratamiento más idóneo para el perro.
 
¡Bríndale a tu perro lo mejor cuidado! 
 
Mascotas&CIA.
 

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